La corriente del golfo no será interrumpida

... pero qué cambios pueden ser esperados en el Atlántico Norte?
 
En gran parte de Europa el clima es influido por aire templado del océano. La energía es transportada por la corriente del golfo, en la parte central de continente Americano (costa sureste Norteamericana). Ciertamente, hay un gran interés en saber si algo podría cambiar en estas condiciones debido al cambio del clima. Los nuevos resultados de la investigación a menudo son recogidos por los medios informativos causando algunas veces preocupaciones basadas en malentendidos.
  

La Corriente del Golfo es conducida por el viento, la Deriva del Atlántico Norte no lo es

La pregunta verdadera con respecto a la Deriva del Atlántico Norte, una rama de la Corriente del golfo. Esta corriente es en particular responsable de las temperaturas templadas en el noroeste de Europa. La Corriente del golfo es un movimiento del océano impulsado por el viento. No puede ser interrumpido por simples cambios en la densidad del agua.
  

La formación de agua profunda en el Atlántico Norte

El paso del Atlántico Norte en el mar polar juega un papel importante en la circulación global de océano. Aquí, dos ramas de la Corriente del golfo se extienden hacia el Norte. Las masas de agua se enfrían y llegan a ser más saladas por la formación de hielo, aumentan en su densidad y disminuyen en el Mar de Labrador y en el Mar de Groenlandia.
  

Formación de las aguas profundas del océano:Fluye en las capas profundas en dirección hacia el ecuador. El movimiento de retorno (particularmente la región entre Noruega y Groenlandia) trae como consecuencia que el agua cálida de la superficie sea llevada relativamente lejos hacia el norte. El beneficio para la costa Occidental de Noruega es un clima templado comparado a otras regiones a la misma latitud.
  

Cambios en el pasado

A través de estudios de cambios de clima durante los últimos 120.000 años sabemos que hay un acoplamiento entre la formación de agua profunda en el Atlántico Norte y el cambio climático en esta región. Observado sobre muchas decenas de miles de años, hay tres estados diferentes en la circulación del Atlántico Norte: una corriente cálida que avanza hacia el Norte (interglacial), una menos cálida al Norte (edad de hielo) o no existente (el llamado acontecimiento de Heinrich). Una cordillera montañosa submarina en el Atlántico Norte marca la frontera entre las áreas de la Deriva del Atlántico Norte alcanzada en tiempos glaciales o interglacial. Aquí, el océano es menos profundo e Islandia y las Islas de Faroe sobresalen del agua. En las figuras esta frontera es marcada en puntos negros gruesos.
 

Durante las edades de hielos, así como durante el interglacial presente, la corriente oceánica sube hasta un cierto límite al norte. El agua penetra lentamente en regiones frías ocasionado la formación del hielo. El agua restante que soporta el hielo llega a ser más salada y por lo tanto más pesada y debido a la disminución de la temperatura  en la región polar, el agua de superficie también llega a ser más pesada. Finalmente se hunde (flecha negra hacia abajo en los perfiles) y forma "aguas profundas".
 

¿Cuándo es interrumpida la Deriva del Atlántico Norte?
 

Mientras el hielo se funde en un período de calentamiento continuo (por ejemplo a fines de una edad de hielo), demasiado agua dulce del hielo fundido puede mezclarse a veces con la del Atlántico Norte. Además, el agua de superficie llega a ser más tibia, mientras el mar profundo es todavía frío. El agua no se puede hundir. En este caso la circulación de océano puede parar temporalmente en la región respectiva. La circulación es interrumpida temporalmente. Esto es llamado "acontecimiento de Heinrich".
 

Estimaciones para el futuro (IPCC 2007)

En la actualidad, los científicos no pueden pronosticar seguramente cómo la Deriva del Atlántico Norte cambiará bajo las condiciones del cambio climático. Se espera que la corriente vaya más despacio, debido a que el agua de superficie ya no gana tanta densidad como antes. La superficie del océano llega a ser más cálida, la formación de hielo menor y la dilución de agua dulce aumenta. El agua dulce viene no sólo de los glaciares que se funden en Groenlandia, sino también de la lluvia creciente en esta región. Una pérdida de la densidad en el agua de superficie ha sido observada sobre el período 1965 - 2000. Por otro lado, la variación en la corriente de océano sobre décadas recientes ha sido tan fuerte e irregular, que no hay estimación posible para saber si el transporte de agua al Norte quizás ha estado cambiando. Si una disminución en la transferencia del calor al norte de Europa ocurriera realmente (esto no sería antes del 2100), el calentamiento climático contrarrestaría, en cualquier caso, el enfriamiento relacionado.
  

Texto: Dr. Elmar Uherek (MPI - Chemistry Mainz)
Traducción: Leticia Reyes
Revisor científico y corrector linguístico : Dr. Juan Carlos Ortiz Royero (Universidad del Norte / Baranquilla, Colombia)