Clima y alimentos 

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Estudios de caso en países en desarrollo

El estudio de caso de Egipto

Antecedentes: La agricultura en Egipto está limitada a las tierras fértiles del estrecho valle del Nilo, desde Asuan a El Cairo y el llano del Delta del Nilo al norte de El Cairo. Estas dos zonas comprenden sólo el 3 por cien de la superficie de Egipto. Todo el agua disponible para el regadío viene del Nilo. En 1990, la agricultura y la ganadería suponían el 17 por cien del producto interior bruto de Egipto.

Problema: El agua disponible para el regadío varía debido a cambios en la disponibilidad de agua dulce y a la competencia entre usuarios. Los precios de los cultivos y los mercados también fluctúan. El objetivo es observar los efectos combinados que las condiciones de disponibilidad de agua y de los mercados tienen sobre la adaptación del sistema agrario.

Métodos: Se puede utilizar un modelo del balance hídrico de la cuenca del Nilo para evaluar la escorrentía del río con el fin de inferir el abastecimiento de agua para la agricultura. Se pueden utilizar modelos agronómicos basados en los procesos, para estimar los rendimientos de los cultivos y las necesidades hídricas del cultivo. Se pueden utilizar sistemas que ayuden en la toma de decisiones, basados en la explotación para probar las relativas ventajas económicas de los cambios de las opciones de gestión.

Escenarios: El clima no es el único factor que varía de año en año. El crecimiento de la población y las condiciones económicas y tecnológicas pueden afectar a la agricultura aún más que los cambios climáticos. Es importante tener en cuenta estos cambios cuando se elaboran escenarios de impactos: sin embargo, la predicción de las tasas de crecimiento demográfico y de las condiciones económicas es igualmente incierta, o incluso más que la predicción del clima. Por lo tanto, hace falta diseñar los escenarios con mucho cuidado para tratar un rango de posibles condiciones. Un método útil sería contrastar las perspectivas “optimistas” con las “pesimistas”. También se debería incluir un escenario que no incluyera cambios (es decir las condiciones actuales). Así, se podrían evaluar los efectos diferenciales de los cambios en la gestión del clima sobre las condiciones actuales, y sobre estos dos escenarios alternativos.

Impactos: Se utilizó un índice de productividad hídrica para medir los efectos sobre la agricultura: producción agrícola total (toneladas) dividida por el total de utilización agrícola de agua (metros cúbicos). Según los escenarios de futuro el índice disminuyó entre el 13 y el 45% en los escenarios optimistas y en los pesimistas, respectivamente.

2. Alternativas para el regadío

Posibles medidas de adaptación de los sistemas de regadío en Egipto. Muchos cultivos, como los cítricos y otros frutales, todavía se riegan por superficie (dejando que el agua entre en los campos y se infiltre en el suelo). Estas ilustraciones muestran el “riego a pie”, que deposita el agua cerca de la planta y en cantidades pequeñas.

Respuestas de adaptación: Se han realizado pruebas sobre adaptaciones a los recursos hídricos (grandes trasvases), los regadíos (mejores sistemas de abastecimiento), la agricultura (variedades de cultivo modificadas y gestión de los cultivos) y la protección de la costa contra el aumento del nivel del mar. Alcanzan un aumento modesto, del 7-8 por cien en el rendimiento del sector agrario, con respecto a la situación en el cual no se hace ninguna adaptación, sin embargo su aplicación conjunta sería muy cara de aplicar. No obstante, invertir en mejorar la eficiencia del riego parece ser una política firme, “sin arrepentimientos”, que podría ser beneficiosa aunque el clima no cambiara.

Autor: Marta Moneo -Universidad politécnica de Madrid - España
1. Revisión científica: Ana Iglesias - Universidad politécnica de Madrid - España
2. Revisión científica: Mónica García - Universidad politécnica de Madrid - España
Revisión educativa: Emilio Sternfeld - Colegio Virgen de Mirasierra - España
Última modificación: 26/01/04